Barintimo

Chequeando que había cerca para hacer me encontré con este lugar… con esta calificación!!! A ver, tengo más de dos décadas de recitales encima, o sea que he ido y me he encariñado con mil antros. Pero este… ay. Es feo, suena mal, te atienden mal, las mesas esta dispuestas mal… y hablemos de los baños por favor: en vez de tener bachas para lavarse las manos, hay ensaladeras de plástico, más precisamente verdes de colombraro. No vayan. A no ser que toque la banda del primo de Tito o algo así… y no quede otra.

Es una sala de conciertos ubicada en Belgrano, a pocos pasos de Avenida Cabildo. Es una casa antigua remodelada para bandas emergentes o que tienen trayectoria en el mundo under.
Se puede tomar una cerveza, un vino. La verdad que no se si tiene coctelera a la carta, porque todo se centra en la música. El espacio está distribuido para ver a las bandas, donde a penas subís las escaleras. Pero se puede recorrer un espacio con sillones para charlar MUY intimo.
Todo está dirigido por Walter, tiene altura media, calvo, enérgico y sabe mucho de sonido, por lo tanto el equipo con el que cuenta es bueno. También se encarga de organizar el line up de la bandas en las noches, en cada entre telón de las bandas tiene un cd de temas repetidos que usa para ganar tiempo mientras el grupo siguiente se prepara, porque él también ayuda a desarmar y ordenar. Finalmente tira un «¿vamos?» para arrancar.
Como concejo, les digo que no vayan a ver a la banda de un amigo, novio/​a si no les gusta el rock duro y parejo, porque el lugar está preparado para pasar un momento de guitarra y batería. Por otro lado lo que quiero aclarar, es que la mayoría de las bandas son buenas y comienzan a eso de las 22:00 y siguen hasta las 3:00 de la mañana.