Conocí el edificio Tornquist el año pasado durante la edición de Casa FOA. Hace tiempo su nombre me resonaba y sabía que estaba en microcentro pero no terminaba de ubicar dónde. El edificio queda a pasos de la casa Rosada, en la parte más agitada del ya agitado microcentro porteño. Tiene una fachada neoclásica inmensa, descomunal, pero que no se puede terminar de apreciar porque se encuentra en una calle finita, con otro enorme edificio en frente. El edificio Tornquist fue originalmente diseñado para ser un banco por el arquitecto Alejandro Bustillo(sí, el mismísimo que diseñó la rambla, casino y Hotel Provincial de Mar del Plata o el Llao Llao en Bariloche, entre otros hitos). El edificio Tornquist era uno de los más modernos de la época, por sus ascensores(que todavía hoy funcionan, me pude subir a ellos) y sistemas de ventilación y refrigeración.