Maru Botana

Maru Botana o muerte.
Probé el 95% de los productos que venden (entre tortas dulces, granola, galletitas, tartas saladas, platos de comida y demases) y TODO es excelente. La calidad de la comida es superior a muchos otros lugares y es apenas un poco más caro que lo normal. Las porciones son ENORMES.
La atención es bárbara y compensa la incomodidad de que el local sea más chico que un ropero.
No dejen de probar las tartas saladas (champignones o zapatiilos) y las dulces de chocolates con frutos rojos.
No defrauda
Hacen también encargos por tortas enteras y las podés pasar a buscar por el negocio. Son muy responsables con el servicio.
Siempre fue solo con pago en efectivo, pero en diciembre agregaron el pago por tarjeta de débito (creo que crédito todavía no hay).

El lugar es pequeño pero vale la pena porq la comida que ofrecen es excelente.
A todas horas, podés encontrar algo rico para comer. Al mediodía ofrecen tres platos, uno más rico que el otro. Pastas, carne o pollo y una buena ensalada suelen ser las opciones. Y entre $ 115,130 el plato.
Todos los días además ofrecen tartas (súper abundantes y ricas), struddels de queso, scons… Además, tienen las típicas tortas de Maru, grandisimas y exquisitas.
Si están por la zona, recomiendo no perdérselo.

había ido muchas veces antes a comer tortas a Maru Botana pero no volvía desde hace un par de años. No volvía pensando que los precios se habían ido a las nubes, pero volví y me lleve una sorpresa los precios apenas habían cambiado a cuando iba (Creo que se debe a que antes si era bastante caro, pero ahora se equiparo al resto de los lugares el precio de la porción).
Las tortas son de las mejores, no ratonean con los frutos rojos, no suelen tener mucha variedad para elegir, suelen tener unas 8 tortas, pero si encargas para llevar una entera tienen bastante mas variedad.
Las bebidas son caras.
El local es chico tiene unas 5 mesitas adentro y poco espacio para maniobrar, la calle es en bajada por lo que si tenes problemas de tobillos es un bajón llegar, pero al ser una zona con muchas casas de artes tenes para entretenerte si vas caminando desde retiro.
La contra es que no aceptan tarjeta.

Es todo delicioso. Solo cash !! Las tortas espectaculares ! Nunca quedas mal. Lugar chico pero producto óptimo.

El problema mayor de esta sucursal es sus dimensiones. Cuando entrás ya podés darte cuenta de eso, porque no es fácil acceder sin estar mirando para los costados con cuidado de no chocar a nadie. Si lo que buscás es privacidad, en las mesas apiñadas de este lugar no la vas a conseguir.
Fuera de eso, es Maru Botana, ¿hace falta hablar de la comida? Las tortas son riquísimas, las porciones son generosas así como la cantidad de ingredientes que incluyen. Pero, ojo, no es lo único que venden. Las opciones para el mediodía son muy tentadoras; los sándwiches, los panes de queso, alfajores y cuadraditos riquísimos.
Sin embargo, las tortas son claramente su fuerte. Con decirles que un día esperé con unas amigas a que el horario de almuerzo finalizara (15:00) para poder comer una porción de rogel les dejo en claro mi amor por ellas.

Recomendadisimo si quieren comer una buena porción de torta! Si bien el lugar no es de lo más confortable, la calidad de la comida supera ampliamente las comodidades mínimas del local! Al no haber mucho lugar se manejan con comida a pedido, por lo que es normal ver gente esperando comida para llevar. Es frecuentado mayoritariamente por vecinos del barrio o gente que trabaja en oficinas aledañas. La atención es buena y en cuanto a los precios son elevados pero lo valen, una merienda para dos puede salir alrededor de $ 170 (las porciones de torta son para compartir). Dato importante no aceptan tarjetas de débito ni crédito!

Mini — micro — nano (!) local de Suipacha casi Arroyo. Mesas tan pegadas que si sos habitué, al segundo mes te llevas todo por delante por los kilitos que aumentaste comiendo las tortas tremendas que hay.
Tienen opciones dulces y saladas, aunque ir un sábado al mediodía, no seríà la mejor opción porque no quedaban muchas cosas.
Las tortas son el fuerte y casi todas las porciones son para compartir.

Si solo tuviera que calificar la calidad y sabor de la comida, se merecería 7 estrellas. Las tortas son de las más ricas que comí, son frescas y perfectas. Hay en general 8 o 9 variedades, algunas clásicas como lemon pie y cheesecake, y otras super golosas. Como adicta a los frutos rojos que soy, la de brownie con dulce de leche, crema y TONELADAS de frutos rojos siempre me puede, pero todas las que probé son deliciosas. Hay otra muy rica que es un milojas de crema, dulce de leche y (por supuesto) frutos rojos; también la de mousse de chocolate es muy rica (eso sí, una bomba) y a veces tienen chocotorta, que es de las mejores chocotortas que probé. Además hay scones, galletitas, muffins y una variedad de cuadraditos y de grisines condimentados. Para almorzar, tienen un menu del día que en general es muy rico, de buen tamaño y a un precio razonable.
El lugar es muy chiquito, es lindo pero no hay muchas mesas y están todas juntitas; a veces está vacío y otras no conseguís lugar. Los comida hace que valga la pena el precio, pero lamentablemente no aceptan tarjeta, lo cual es una gran desventaja.
En síntesis, lo super recomiendo para merendar, las tortas son espectaculares. Pero eso sí, lleven mucho efectivo.

Este es un lugar muy pequeño con mucho encanto, que ofrece las especialidades ya conocidas de Maru Botana, como tartas, ensaladas, tortas y tartas dulces.
El lugar esta abierto para el desayuno almuerzo y merienda. Cierra para la cena. El desayuno es económico y abundante. Para almorzar cuentan con un menú de medio día con dos elecciones diferentes todos los días que suelen ser tartas, carnes o ensaladas.
Recomendadísimos los scons dulces y salados que son deliciosos.
El ambiente es agradable, va gente de las oficinas cercanas y de la cultural inglesa y es un publico tranquilo. Esta el diario de todos los días y también hay revistas que cada uno puede buscar para leer.
El lugar también ofrece comidas y masitas ricas para llevar a casa.