El Rosedal

Un lugar bellisímo como pocos.
El Rosedal tiene añares y sigue siendo igual de lindo. Su buena ubicación (sobre calle Oroño) hace que todos estemos al alcance para visitarlo.
Ubicado dentro del predio del Parque de la independencia este espacio bellisimo esta repleto de rosas de todas las formas y colores.
Solía ser uno de los lugares elegidos para los videos de cumpleaños de 15 o de bodas, hoy hay cosas más modernas pero no creo que más lindas que este escenario natural que ofrece el Parque Independencia.
Se puede ver allí personas haciendo deporte ya que está preparado para largas caminantas o trote con indicaciones de kilometrajes, para parejas se torna un lugar romántico, el paisaje lo hace todo por vos! Y mucha gente disfrutando del verde aprovechan el lugar para tomar mates, pasear y hasta leer o estudiar en el césped ya que tiene lugares en donde sentarse no cuesta mucho.
La fuente de los españoles acompaña esta vista, llamada así porque esta hecha con cerámicos traídos desde España, hacen del paseo un completo encanto!
La contra que tiene esta parte del Parque es que si vas muy temprano, antes de las 7.30 y luego de las 20 hs suele ser algo peligroso. Cuando la ciudad apacigua su ritmo hay que estar más atento!

Para mí, todo el Parque Independencia ha sido alguna vez, gracias a la cercanía de la casa de mis abuelos con este bosque urbano, un gran patio de juegos. El Rosedal le gustaba a mi abuela, porque le gustaban las rosas.
Recuerdo que mis hermanos y yo corríamos desaforados, subiendo y bajando «la montañita». Cuando llegábamos a la cima, a la pégola, nunca sabíamos muy bien qué hacer, así que bajábamos corriendo para abrazar a mi abuela, que nos esperaba sonriente en un banquito, junto a alguna rosa, y nos recitaba: «cultivo una rosa blanca».
Me ha decepcionado ver que desde hace un tiempo, ya no sé cuánto, inhibieron el acceso a la pérgola: los vagabundos y los yonkies sí que sabían usar la casita esa.
En una esquina de la manzana del Rosedal, hay una alegre galería bordeada por un estanque. La santa rita se enreda entre las vigas de cemento, las parejas eligen este recoveco para hablar de amor. En el otro extremo, la «Fuente de los españoles» hace alarde de sus mosaicos que retratan escenas caballerescas. Es un lindo paseo, el Rosedal. Tienen algo de melancólico esos senderos de piedritas rojas, esos islotes con rosas, esos pinos aptos para ser trepados. Es un lindo paseo.

El Rosedal es uno de los espacios más antiguos del Parque Independencia, ya que data de principios del siglo XX. Es una enorme plaza ubicada sobre el Bv. Oroño, detrás del country del Club Gimnasia y Esgrima, surcada de caminos de piedritas naranjas entre los cuales crecen rosales y otras plantas florales. Para los que le tienen más resquemor al pasto, el lugar está lleno de bancos de madera y de material en los que sentarse a descansar, y si bien no son súper abundantes, hay muchos árboles que dan buena sombra para resguardarse en los días de sol.
Dicen que es parecido al Rosedal de los Bosques de Palermo, pero yo sinceramente nunca estuve ahí así que no podría afirmarlo. Lo que sí puedo contar es algunas de las cosas que hay y que lo embellecen.
Primero, hay una pérgola cubierta de enredaderas por la que es bonito pasear, ubicada junto a una especie de estanque que si bien no tiene el agua más limpia del mundo, le da al lugar un toque romántico. Además hay una fuente rectangular que no es nada profunda, en la que los perros y los chicos gustan de chapotear en los días de calor. En uno de los extremos de la plaza hay una «montañita», que según dicen está hecha con la tierra que sacaron para poner las fuentes, por la que los chicos corretean y las parejas y familias se sacan fotos. En la punta de la montañita hay una pérgola a la que no recomiendo entrar, ya que no suele oler muy bien ja.
El lugar es el elegido por mucha gente que sale a hacer ejercicio (cuando era más chica mi mamá solía llevarnos todos los sábados porque ella iba ahí a caminar), porque su perímetro tiene un kilómetro (cada cien metros está marcado en el suelo) y entonces es fácil llevar la cuenta de lo que se ha caminado en una tarde. Además muchas familias llevan sus chicos a andar en bicicleta ahí, no sólo porque la vereda tiene la bicisenda señalizada, sino porque además la plaza en sí tiene tantos caminos que se abren y se bifurcan que es muy entretenido recorrerla.
Como todo el Parque Independencia, es muy bello y está muy bien cuidado, pero de noche se vuelve un poco peligroso ya que es muy grande. Para cuando baja el sol mi recomendación es mantenerse del lado del Boulevard, porque adentro es más oscuro y menos transitado.

Al haber pasado toda mi infancia viviendo en el Barrio Parque el Rosedal fue siempre el lugar predilecto para tomar mates o pasear. Tengo miles de recuerdos y horas inolvidables disfrutando los últimos rayos de sol que pasan gracias a su cielo abierto. El más antiguo es haberme pinchado con los rosedales de muy chiquito por estar jugando a la pelota y usarlos como palos del arco.
Es el lugar ideal para pasear en pareja. Tiene varios bancos y montículos donde se puede uno sentar si necesidad de lonita a tomar mates. También tiene espacios abiertos como para jugar a la pelota con los más chiquitos y varios espejos de agua que refrescan la vista.
Si te ubicas muy cerca de Bv. Oroño vas a ver pasar un montón de personas corriendo, ya que hay varios clubes alrededor: como Provincial o GER. Además todo el parque sirve de circuito para los más deportistas. Pero si vas más cerca de la pérgola vas a estar más tranquilo.
Poder hacer siestas a la sombra de un árbol es cosa de días de semana, porque durante los findes está lleno de heladeros, churreros y puestos de pororó con la inconfundible Para Elisa midi. Igualmente es el único detalle que se añora al vivir en el extranjero y tomar mates en parques foráneos.

Al escuchar el nombre, la imaginación crea una especie de vivero gigante, al aire libre, donde viven todas las rosas habidas y por haber de la ciudad. Suponés que están ahí esperándote, resplandecientes para tantas fotos, con sus colores cálidos en gama de rosado, perfumando con su aroma.
Bueno, esto pasa solo en la imaginación porque el Rosedal no es lo que uno cree.
Entonces ¿qué es?
Es una de las tantas plazas que componen la inmensidad del Parque de la Independencia y claro, tiene rosas. Ellas, con otros rosales y flores están distribuidas, sin dar mucha información de procedencia u origen, u otros datos que podrían ser interesantes para quien recorra los caminos de piedritas rojas que van para todos lados. También hay, una pérgola y un laguito de agua verde, bastante desatendidos.
Si alguna vez anduviste por los Bosques de Palermo en Capital Federal, la estructura te va a resultar conocida porque es prácticamente un calco al Rosedal de allá, con estatuas, fuentes y bustos en un espacio mucho pero mucho más chico y por supuesto, con muchas menos flores.
Igual, si andas de paseo, podes aprovechar los banquitos de madera para tomar unos cuantos mates, pero ojo con la hora, si se te hace tarde, tené un poco más de cuidado que el habitual. Yo avisé!