Cuando yo era chica tenía una amiga que vivía en la Casona de Las Condes, su mamá administraba el lugar así que tenía su casa ahí mismo. Era un lugar increíble, por sus extensos terrenos pero sobre todo por la casa principal, donde hoy se ubica la UNAB, y el espacio donde se hacen los eventos. Es aquí donde viví varias historias entretenidas, cuando éramos bien chicas jugábamos adentro de esta casona, que no era otra cosa que una casa de campo enorme, con una arquitectura bien rústica y una decoración y ambiente bien bucólicos. Había una leyenda que decía que si uno bajaba al subterráneo podía encontrar un túnel que llegaba a Argentina. Muchas veces intentamos encontrarlo, pero apenas bajábamos las escaleras terminábamos gritando y jurábamos que veíamos fantasmas. Después más grandes hacíamos las fiestas de curso ahí, imagínense la suerte y el lujo! eran un éxito obviamente, el mejor lugar rodeados del mejor campo. Últimamente me ha tocado ir a un par de matrimonios y debo decir que es el mismo lugar bucólico, de grueso adobe, muy bien tenido y precioso para hacer fiestas, sobre todo matrimonios. El lugar es realmente perfecto, ojo que fue declarada monumento nacional.