Dos pisos contempla este local, que lleva años en el mercado. En el primero, hay una librería y en el segundo, alrededor de 500 disfraces de todo tipo: samurai, árabe, soldado, personajes, etcétera. Es un mundo soñado lo que existe en telas. Una difícil misión, porque todos están muy bien confeccionados y son atractivos hasta el más simple. A su vez se venden accesorios como sombreros y capas, en fin, un amplio surtido para elegir. Hay para niños y adultos. También está la posibilidad de arrendarlos y el valor fluctúa entre $ 12.000 y 15.000. A su vez, se puede mandar a hacer un disfraz, si se va con tiempo. Mi marido se arrendó uno de samurai, con capa y sable para una fiesta de disfraces que tuvimos. Parecía un verdadero luchador. Le costó mucho llegar a él, estaba en la duda, sin embargo y aunque habían más samurai en el evento, su traje era el mejor sin lugar a dudas. El local abre de 10:00 a 18:00 horas y es atendido por sus propios dueños.