Bar Fly

We wandered in here while doing an impromptu bar crawl. We saw people drinking Corona in bottles but it looked pink. Turns out it was Corona, tequila, grenadine, and lime. Of course we got some and it was pretty good. The music is reggae and some guy was smoking even though there were no smoking signs everywhere. It’s a dive bar. I’d go back. :)

Desde el primer fin de semana que mi hija pisó León, conoció el Bar Fly, llegando con la gordita, su amiga, las dos me dijeron «encontramos EL lugar». Me contaron que tiene un súper ambiente que hay muchísima gente extranjera lo que lo hace muy versátil.
Venían fascinadas por el concepto del lugar, ellas los llaman un bar libre, yo conociéndolas, puedo adivinar que es un bar un tanto hippie. Pero bueno, en mis tiempos también me fascinaban estos lugares, ahora ya me gusta algo más tranquilo, ya sería de lo más extraño que fuera a bailar a uno de estos lugares.
He pasado por afuera y siempre a todas horas hay escándalo, y hay gente llegando, así que me supondré que mi hija tiene razón en cuanto al ambiente. El lugar tiene una pinta muy padre, diferente, porque aparte hay una zona de arriba que esta descubierta. Cada que no localizo a la gorda y a moni, ya me puedo suponer en donde las encontrare.

No es el lugar más bonito del mundo. En serio, las paredes rayadas, la iluminación y el espacio dan más la impresión de un sitio de mala muerte. Como la casa de Jesse –Breaking Bad– cuando se llena de drogadictos. Hay que aprender a amar al Fly, y eso se logra con los detalles. Primero, la música. Dos o tres canciones de reggae y ska son suficientes para agarrar el ritmo. El ambiente, aunque apretado, nunca me ha tocado menos que amistoso. Y la decoración: es decir, ¿cuál? Si pones atención, la han dejado a voluntad de sus clientes, entre fotos, mensajes y banderas. Poco a poco descubres que este lugar no es nada amenazante y, muy por el contrario, es bastaaante relajado (if you know what i mean). Una vez que le halles el gusto, no querrás salir hasta el día siguiente. Y por lo mismo, no es para todos los días. En Cervantino es impensable entrar aquí. ¿Qué mejoraría del Fly? La atención. Es bastante irregular.

El Fly también es famoso en Guanajuato y además de lugareños, siempre está lleno de turistas. Sin importar que el lugar que ocupa le quede chico en jueves y viernes, y durante el Festival Internacional Cervantino, que es cuando se pone a reventar, en el Fly suelen haber conciertos de bandas de las muchas variantes de rock y reggae, de las que no hablaré porque no sé mucho de géneros. Pero el punto es que a pesar de que muchos se quejan a veces de que ya entrada la noche, la limpieza no reina en el lugar, la fiesta se pone bien para quien disfruta este tipo de música. Son famosas las burras, que es cerveza con tequila y granadina, muy pegadoras, que le hacen honor al nombre. Aunque entre semana está tranquilo, los fines hay que llevar identificación, aunque a algunos nos parezca absurdo, podemos sentirnos halagados de que en respeto a las reglas de fiscalización, nos dejen afuera en las noches concurridas.

Este bar se encuentra ubicado en la zona central posterior al Teatro Juárez, por lo que este lugar forma parte de la variedad del entretenimiento nocturno guanajuatense. No obstante, este bar tiene la particularidad de estar ambientado dentro del género reggae tanto en su decorado como la música que en su mayoría ahí toca. El precio de las bebidas a consumir resulta ser bastante accesible, y éste aumenta conforme la bebida lleve más ingredientes.
Sin embargo, si uno encuentra desagradable el olor excesivo a cigarro y la contingencia de gente donde inevitablemente se codean o pisan entre sí, este lugar no debería ser considerado, pues en algún momento de la noche, este bar cobra una vida excesiva y dado su reducido espacio resulta incómoda la convivencia. No obstante, esto depende del azar, pues existen veces que el ambiente es muy agradable y pacifista sin importar que esté al tope. Por otra parte, de un tiempo para acá se ha acrecentado la fama que este bar es últimamente concurrido por gente un tanto conflictiva e impertinente ya alcoholizada, lo que pudiera provocar una mala experiencia si uno visita el lugar.

Conocí este bar apenas el año pasado, en época de Cervantino así que imagínense como estaba de lleno.
Una de mis amigas ya lo conocía, así que estaba terca con que fueramos ahí y a probar una bebida que se llama «Burra» y que estaba riquísima, así que decidimos ir a ver que tal.
Este es un buen lugar que te agradará si te gusta conocer nuevos conceptos.
Aquí se hace un buen ambiente, tiene bebidas muy peculiares unas más fuertes que otras.
La música que tocan en este lugar es reggae, la verdad no soy muy fanática de esta música, pero el ambiente es muy bueno y te diviertes mucho.
Las instalaciones de este bar no son las mejores, o talvés no las aprecie mucho, por tanta gente que había.
Las paredes tienen materiales reciclados pegados y la barra se encuentra a una orilla en la entrada.

Este bar fue ampliamente recomendado por personas tanto locales como amigos que habían visitado Guanajuato y no defraudó. Es súper reggae, la música esta padre, a pesar de que no soy tan de ese estilo si me divertí. Tiene dos secciones una como más tranqui y otra más movida, no conozco sobre el tipo de música pero era un tanto como reggae rap raro pero chido. El lugar en si es medio hippie, la decoración esta muy random, pero toda bajo este mismo concepto y sobre todo predominan los colores rojo, verde y amarillo. Nos acercamos a la barra y pedimos dos bebidas que son como la especialidad de la casa el Rasta Fly y el Burra Salvaje. Los dos drinks súper ricos, el rasta más dulce ya que tiene ron coco, ron, curacao, naranja y granadina, el otro tenía solo tequila, limón y granadina y esta padre la presentación que te la dan en un envase de cerveza. Había tanto locales, como turistas y extranjeros todos bien animados, un ambiente divertido, gente bailando y con buena vibra.

La verdad es que no soy de esos que dicen: «¡vamos al Fly!», cuando mis amigos preguntan, pero cuando ellos quieren ir, aunque me rehúso un poco, termino por acompañarlos. He vivido un sinfín de aventuras y desventuras en este bar, pero una de las mejores, la comparto con una amiga, no sé por qué terminamos ahí, la verdad es que solo íbamos al centro por una pizza, de un lugar que nos encanta y que luego les platicaré, ya adentro se sentía el calor y el olor humano, pedimos una de las mentadas burras para refrescarnos un poco, una bebida preparada con cerveza, granadina y tequila.
Después de un rato comenzó un grupo a tocar canciones que la verdad ni conocía, pero la euforia que se transmitía era tanta que no lo pudimos evitar, la pasamos saltando y tarareando entre la multitud hasta que se terminó. Ha sido mi mejor experiencia en aquel bar, que no a todos les agrada, pero cada vez que la recuerdo no puedo evitar sonreír.

Parece que el Fly siempre está abierto no importa si es feriado o si cayó una lluvia torrencial. Este bar ha albergado a estudiantes, viajeros nacionales e internacionales y habitantes de Guanajuato desde hace muchos años. La entrada está decorada con las cientos de fotos que tapizan la pared.
Se caracteriza por ser un lugar con ambiente alivianado y poner música reegae y varios ritmos latinos e internacionales para bailar. De vez en cuando tienen bandas en vivo. En varias noches recuerdo haber sacado brillo a la pista con un DJ que prendió a toda la banda, no sólo a mis amigas y a mí. Puedes encontrar cualquier tipo de bebida pero sobre todo cerveza y las famosas «burras» que te pondrán feliz.

Vienes a Guanajuato y has pasado todo el día visitando lugares de las recomendaciones Unilocalenianas que has visto en la aplicación dejas que pase la noche y ya no sabes ¿qué hacer? Fácil empieza a visitar la vida nocturna de esta mágica ciudad (que nadie me dejara mentir es toda una experiencia) mientras que decides a donde ir te recomiendo empezar con el Bar Fly es un ambiente super relajado con un poco de ska, reggae, surf y algo de rock te empiezas a llenar de este ambiente de estudiantes.
Si te animas hay dos bebidas que son de ley que debes probar una es un Rasta y la ya conocida Burra estos dos son básicos del lugar y no debes de irte de ahí sin antes probar uno (como mínimo) aunque en mi experiencia personal no querrás irte, el ambiente siempre se pone interesante los meseros y barmans tienen una vibra tan rica que se percibe desde que entras.

Aquí el Reggae es lo fuerte. La onda hippie… el «amor y paz» se respira en el aire, la buena música, las famosas burras y el rastafly…
Ir al Fly siempre ha sido toda una experiencia, por años fue el lugar favorito de la «banda» para ir a precopear, es decir para comenzar la noche de juerga. En más de una ocasión tuve la fortuna de escuchar bandas en vivo, y aunque el lugar es muy pequeño, lo de menos es estar apretado, aquí vienes a pasarla chido.
Lo padre del Fly, es que los grupos invitados son tanto nacionales, como internacionales, y lo mismo pasa con sus clientes, puedes venir y conocer a un argentino circense o a un alemán de intercambio o hasta al cantante de un grupo famoso.
Mi recomendación son las famosas «burras», una de las bebidas más conocidas y que caracterizan al Fly, ideales para empezar la noche.