Mi mama entre todo lo que sabe hacer es costurera y siempre la tenemos a la mano cuando ocupamos algún arreglo de la ropa, pero un día a la señora se le ocurrió irse a Culiacán 2 meses yo casi me moría cuando tuve que ir a comprar un vestido para un fiesta y como soy chaparrita había que levantarle un poco la bastilla. Esta en un caos total porque no sabía dnde y quien me podía ayudar hacerlo y claro mi mama de vacaciones. Le hable a Elena y ella me dijo que por su trabajo había un lugar muy bueno donde te podían arreglar lo que quisieras y pues ahí voy a ver que podían hacer por mi vestido, llegue y una señorita me atendió, pase a un probador y pues en menos de 5 minutos ya sabía lo que le tenía que hacer al vestido, fue muy amable y me lo tuvo en el momento además de esto te hacen bordados, ajustes de la ropa, cambian cierres. Una buena opción para cuando mi mama no esté en casa.