Seré sincero con ustedes fieles lectores, nunca he dormido aquí, un día casi, pero no… se dé buena mano que sus precios son baratos, pero algo si les digo y con mucha seguridad, su cocina esta de p.m. Está ubicada enfrente de la ESAY(Escuela de artes) famosa por su exquisita comida casera y sus accesibles precios de estudiante, es un rinconcito de sabor donde como dicen por ahí, esta rebueno para hincar el diente, por cierto no son poquiteros, el plato está bien servido, como debe de ser. Aparte del plus que tienen de la comida, el lugar es limpio, barato y está bastante cerca del downtown, he sido backpacker en varias partes de México, Sudamérica y otros lugares, y este es el tipo de posada que busca un viajero que la lleva alivianada, súper recomendado para el que está de paso y necesita cuarto unos días.