Café Nouveau

En este lugar he comido los baguets más deliciosos que se pueden imaginar, además de por sí tienen nombres muy atractivos como estilo Europea, América, Italiana, Noruega, todo lo pides en el mostrador al llegar y luego te lo llevan a tu mesa.
Me gusta también que tienen unas mesas y unas salas bastante cómodas, aunque no es muy apto para grupos grandes, para cuatro o cinco amigas el espacio es perfecto.
Además si tienes mucha hambre con uno de los baguets de este lugar te alcanza perfecto, por lo que nunca te quedas con hambre. Uno de mis compañeros de trabajo me recomendó comer aquí y con gusto acepté su invitación, me dijo que no me arrepentiría y así fue.
Además el lugar se encuentra pintado con colores muy tranquilos y bonitos.

Llegue a este lugar pensando que sería una excelente opción para tomar el café con el meñique levantado. Debo confesarles que para nada me gusto y les voy a explicar porque. Pedí un café y no es que yo sepa mucho de café, lo que si sé es que no me gusto ni tantito. Ordene una ensalada pensando que por su precio excesivo estaría rica pero pues también me decepciono. El servicio es bastante malo y los precios son bastante altos, tal vez por la ubicación en la que está instalado el café y están tratando de sacar lo de la renta.
Cuentan que muchos estudiantes son los asiduos clientes de este lugar debido a un paquete en el que les incluyen un baguete, papas y refresco por tan solo $ 35. De ahí en fuera si tienes ganas de otra cosa mejor te recomiendo ir a uno de tantos cafés que hay en la zona.

No hay duda de que lo mío lo mío, es la comida. Café Nouveau, además de vender unos cafés extremadamente deliciosos (y eso que no me gusta mucho el café), también puedes encontrar tipo chapatas, ensaladas, postres, pan, entre otras cosas. Un jueves por la tarde mis amigos y yo decidimos cambiar las cervezas y la botana, por un buen cafecito, té y una buena ensalada.
Los precios son bastantes considerables, el lugar pese a que no es muy grande, es muy agradable. Los meseros que nos atendieron se portaron muy atentos y siempre al pendiente de lo que nos hiciera falta. Como fondo una música muy tranquila y relajante. Al parecer es el lugar preferido de muchos porque se veía su cara de tranquilidad y la manera en la que pedían sus cosas, tal vez solo eran clientes frecuentes, yo que sé, soy muy fijado.
Finalmente creo que puede ser el lugar ideal para una buena cena entre amigos o pareja.

Esta cafetería está re coqueta, la verdad es que tiene una entrada muy pequeña pero de ahí en fuera, el lugar es muy amplio, hasta tiene un tapanco para que arriba de donde ellos preparan el café y la comida te puedas sentar.
En total son como 10 o 15 mesitas con sillones que además de todo están muy cómodos, para que vayas tú solo, con tus ligues o con amigos, porque hay para todos.
Aquí vas a encontrar las ya tradicionales bebidas y alimentos de una cafetería, lo que tiene como ventaja es que de repente pone promociones que si bien no son lo máximo, te hacen ahorrar un poquito, como un churro gratis en la compra de tu bebida caliente. La atención maravillosa y siempre atentos en todo lo que necesites.

Un café pequeñito pero cumplidor, a pocas cuadras del zocalo y una del andador turístico, me ha salvado de varias, cuando tengo poco tiempo para comer y cuando muero de hambre, creo que su café no es lo mejor que tienen, pero no es malo, regular, la comida es buena y a precios muy razonables, las ensaladas son buenas, utilizan lechuga hidropónica y ocupan un buen aderezo italiano, también puedes pedir un sándwich, hamburguesas, baguettes y otros platillos en la carta, refrescos, café, cervezas, maneja también algunos paquetes que incluyen papas y refresco, muy buenos si necesitas comer bueno y barato, con alrededor de 60 pesos puedes comer algo de los paquetes y con aproximadamente $ 110 puedes pedir algo de la carta, la atención no es de lo mejor, y el local es algo pequeño pero bien distribuido en ningun momento sers problems lo reducido del local. Siempre una buena opcion.

Es de esos lugares que como universitario alucinas, por el tiempo es la comida de todos los días por ser barato, pues venden un el paquete bastante repetititvo que consiste en un baguette de jamón, queso acompanado de papas y refresco, si tienes prisa este lugar es ideal.
Mejor ni vean el menú porque es caro y no vale la pena.
El lugar es pequeño, no tiene muchos empleados.
Hacen ensaladas que no están nada mal pero caras.
No vayan no van a encontrar nada extraordinario, hay mejores lugares y más accesibles
El café es de máquina, si eres intolerante a la lactósa mejor ni pidas el chocolate abuelta te probocará malesta estomacal.

El café Nouveau se ha mantenido a lo largo del tiempo, quizá por su ubicación o tal vez porque siempre está abierto, al menos entre semana. Ofrecen baguettes y refrescos, tienen un TERRIBLE café, ya sabes, la máquina de Nestlé, así que es una buena opción si tienes prisa y sólo deseas algo parecido a una torta un poco más «sustanciosa», son bastante rápidos en su servicio y definitivamente su gran cualidad es que se trata de un espacio cerrado, lo que habla de la limpieza en el manejo de sus alimentos (o al menos es lo que me gusta creer).
Este café tiene ya varios años, recuerdo que en sus inicios ofrecía clericot, sangría, vino… su carta de baguettes era extensa, por lo visto no funcionó y ahora parece ser una tortería con bolillos más grandes de lo normal, sus bebidas se reducen a los refrescos y al pésimo café de Nestlé; su especialidad es vender sus productos para llevar y sólo manejan efectivo.

No es el mejor café de la ciudad, pero tiene algunas cosas que lo hacen rescatable, empezando por el paquete de baguette, papas y refresco, pues cuando tu presupuesto es escaso, te saca de problemas, además la baguette aunque sencilla, cumple muy bien su función de saciar tu apetito, aunque la «ensalada» es más bien parte de la baguette, solo que la ponen afuera para que el platillo se vea más ostentoso de lo que realmente es, las papas son otra historia pues no siempre saben muy bien que digamos, pues en ocasiones están más grasosas de lo que deberían.
Uno de los detalles a saber, es que es cuando está lleno el servicio no es de lo mejor que digamos, pues solo hay una o dos personas atendiendo, así que te puedes imaginar lo que ocurre cuando hay bastante gente.

Es un local bastante chafa. Lo único que le agradezco es que me haya alimentado (y engordado) con su «pakecompartas», que durante mis años de universitaria (hace apenas 5) fue mi sustento. Está integrado por un baguette, un refresco y papas por supuesto, a una módica cantidad de 35 pesitos.
El servicio es malo, siempre tienes que irte hasta el local contiguo (las tortas de bamby) buscando al que atiende, quien siempre sale con malas caras casi aventando la carta. Además tarda milenios en freír las papas.
Es como la cafetería de la meso (universidad que se ubica enfrente) por que sobrevive sólo de los estudiantes hambrientos que adentro de la uni no tenemos más que dulces para comer, pero en realidad son pocas las personas ajenas a esta escuela las que entran a comprar algo.
Es un sitio poco recomendable, venden lo básico, pero si quieres aventurarte a esta experiencia, adelante. El baquette es bueno y después que lo terminaste al igual que tu refresco y te diriges a pagar en caja, llegan las papas jajaja. La expeción es cuando lo pides para llevar.

Si eres universitario o vas de rápido y no quieres gastar mucho, pide el paquete de baguette y refresco, te lo preparan muy rápido, cumple el papel de satisfacer tu hambre, porque en realidad no es nada que digas wow. Solo es pan, jamón, machego y a un ladito ponen la lechuga, tomate y aderezo. También el paquete incluye papas.
Es mejor que pidas eso y te vayas porque el servicio no es muy bueno, solo hay una persona cocinando, cobrando y preparando entonces no puedes exigirle mucho a un pobre ser humano que desempeña muchas funciones y a la vez nada. Los postres son congeladas, lo cual odio y jamás consumo.
El dato: El Wi Fi es abierto, así que puedes estar cerca y estar ocupando su red de internet. Sus ensaladas pasan la prueba al menos la cesar si es buena y sustanciosa.

Un café que podría ser bueno pero resultó normal.
Y es que está bien, pero no sobresale ante todos las cafeterías de la zona.
Es un buen lugar si estás buscando nada más irte a tomar un café.
Puedes pedir algo de la carta de alimentos (dónde se podría encontrar un punto en el que sobresalen).
Su especialidad son las ensaladas, que aunque no soy muy fan, las que preparan aquí no están nada mal.
Pero si ya de plano tienes pesadillas con la lechuga y las verduras puedes pedir una baguette, que son bastante sabrosas.
El lugar podría mejorar en varias cosas:
El precio es un poco elevado para los productos.
La comida es rica pero las porciones son pequeñas.
La decoración podría mejorar bastante si explotarán todos los elementos propios de Oaxaca, un poco de aventura al decorar no les vendría nada mal.
¡Con estos arreglitos podría quedar un excelente lugar!
Y es que el café es bueno, digno de Oaxaca.
Y la comida es muy rica.
O a lo mejor es que yo quiero emociones fuertes todo el tiempo y este lugar es el ideal para pasar una mañana o una tarde tranquila, leyendo una historia que te tenga atrapado y para la que necesitas mucho silencio para disfrutar.