Fundación Residencia de Estudiantes

Estaba yo en Segovia. No sé, habían hablado tanto de taaaantos estudiantes que habían pasado por allí, que quería conocerla. Por el ambiente. Y porque escuché en la radio que hacían cosas de gratis. Vale, parece que soy una agarrada, pero es que nunca he nadado en la abundancia.
Hay que meterlo en agenda. Hacen cosas maravillosas. Ojalá fuera más lugar de reunión de la juventud que, yo que sé, ¿Mujeres, Hombres y Viceversa?
El patio es precioso. Para caminar, y ensimismarse. ¿Sabíais que también hubo una «Residencia de Señoritas»? Actualmente, está la Fundación Ortega y Gasset…

Me encanta caminar por lugares emblemáticos, con historia. Sentir que por donde mis pies pisan, un día también pisaron los pies de grandes personajes, como Lorca, Dalí y Buñuel, en este caso, tres de los hitos españoles que más admiro. Por eso cada vez que voy me sobrecoge pensarlo y saber que allí se conocieron y se unieron, aunque después el destino los quisiese separados, pero su historia siempre será inolvidable.
En fin, dejemos a un lado melancolías varias, y centrémonos. Porque hoy en día La Residencia se ha renovado, y por ello somos capaces de disfrutar de todo lo que fue y de todo lo que es y será, con su centro de investigación, sus exposiciones, sus conferencias, debates, lecturas, conciertos, y mucho más. Hoy, como antaño, la Residencia de Estudiantes sigue siendo un punto de referencia clave para la cultura española.

Pues sí, sí, la emblemática Residencia de Estudiantes que hoy en día, supongo que no tiene nada que ver con lo que fue y por donde pasaron grandes figuras españolas como Lorca o Dalí, tiene una cafetería.
Así, con la excusa de ir a visitarla puedas tomarte algo o viceversa.
Es una cafetería que no tiene nada del otro mundo; es relativamente nueva y acogedora. Está muy bien para desayunar o para tomar un pincho a mitad mañana. También tienen tapas.
Para comer o cenar hay un restaurante con carta.
Pero, bueno, lo importante no es la cafetería en sí, si no lo que la envuelve.
Vale la pena pasarse por allí.