Juan & Juan

Bonito sitio y mejor comida. Un menú original y rico, en el que sólo me falló el detalle de que las patatas fritas eran congeladas. La patata asada con bacalao, un must, que sin duda repetiré cuando vuelva. Muy buen servicio, atento y pendiente de ti, pero sin caer en la pesadez en ningún momento. O sea, ese dificil equilibrio…
La sala muy amplia, y a medio día bastante vacía (supongo que se anima más para las cenas). Un sitio sorprendentemente acogedor y recomendable.

Bueno, bueno, bueno… menuda joyita de sitio. Lo vi hace unos meses, paseando una noche con unas amigas por Chueca y me dio buena impresión. Anteayer busqué el teléfono en Unilocal para hacer una reserva y las críticas me dejaron con más ganas aún, así que ayer fui con muchas ganas, y salí con más ganas aún: en concreto, de volver.
Bien atendido, comida excelente, un local amplio y cómodo, decorado con originalidad y buen gusto, precios más que razonables…
Comimos de menú y probamos el plato de cuchara (unas patatas a la riojana que me hicieron pensar que había una abuela a los pucheros) y patata asada con bacalao, más pluma ibérica, una pieza que todavía no había catado nunca y que pienso pillar la próxima vez que la vea en una carnicería.
Si el menú era rico y variado, la carta me pareció un tesoro de tentaciones, y os aseguro que pienso dejarme tentar de nuevo muy pronto.
Mi único pero. la pluma ibérica vino acompañada de patatas fritas precortadas. Ricas y nada grasientas pero… donde estén unas patatas fritas hechas a mano, no hay color. Por eso no le he dado la quinta estrella. Aunque no descarto que se la otorgue en próximas visitas.
Ya sabéis, si pasáis por la zona y no sabéis donde comer o cenar, de cabeza a Juan&Juan, sin dudarlo

Estuvimos aquí probando el menú del día. Yo pedí la crêpe de setas –muy rica, aunque me sobró la decoración de la reducción de vinagre-​, y unas costillas al horno que, bueno, no me emocionaron.
Sí lo hicieron en cambio los postres y el servicio. Muy cordial y atento.
El sitio es muy bonito, y la comida llega rápido y bien presentada.

Mañometro: Chorizo criollo? Ma’ca !!
Tenía bastantes ganas de pasarme por este restaurante en el corazón de Chueca (Calle de San Marcos — Esquina de Taste of America hacia abajo) guiado como no por los excelentes comentarios de varios Unilocalies de mi confianza, y he de decir que como siempre fue todo un acierto.
Nos plantamos allí a las 13:30 del Domingo aburridos de dar vueltas por casa y con ganas de darnos un homenaje, en primer lugar y lo mas reseñable del lugar — EL TRATO-​, es maravilloso que conforme te dan mesa todo el stuff ande con una sonrisa en la cara y no paren de recordarte lo bien que vas a comer y que para cualquier cosa no te cortes y les llames. Para terminar de enamorarnos nos obsequiaron con una tapita de champiñon y una jarra de agua bien fresquita.
Sin olvidarnos del menú para dos, donde las raciones estaban perfectamente dimensionadas y muy cuidadas:
Croqueta de jamon: 1 E — muy muy rica, aunque cierto es que las he probado mejores.
Tostada de tomate y anchoa: 1 E — segun dijo mi comensal exquisita
Chorizo criollo con chimichurri: 8 E — muy tierno, y con un sabor increíble
Milanesa con tomate y provolona: 10 E — la joya de la corona, una autentica delicia.
Volveré en breve, pues me quede con ganas de probar el menu del día.
Donde has estado tantos años Juan?

Lo he conocido entre diario y de menú y me ha conquistado. Por 11 € unos platos originales y de una calidad muy buena. El postre me pareció más sencillo, pero mantuvo el nivel de calidad.
Además la camarera fue un encanto. El lugar es tranquilo y espacioso, y aunque no probé nada de la carta (con precios bastante buenos). Un lugar para repetir de noche y arriesgar a pedir de la carta.

Interesantísimo restaurante de comida casera en pleno Chueca. Tenía ganas de probarlo, porque había oído hablar bastante, pero todavía no había tenido oportunidad. Por fin el otro día, me acerqué a probar esa carta separada por precios, para que adaptes tu cena a tu bolsillo.
Eso, ya de entrada, me pareció una idea estupenda: en lugar de tener cientos de precios diferentes, basta con que tengas unos cuantos contenedores y en cada uno pongas cada cosa. Al fin y al cabo, se hace más fácil luego hacer las cuentas cuando se va con amigos, y tiene mucho sentido.
Yo, sin embargo, opté por comer de menú del día. Para empezar un risotto que me sorprendió bastante, y que estaba muy rico. Y luego, una milanesa de pollo, que coroné con un flan de café. ¡Todo fantástico! Por si esto fuera poco, el servicio fue atentísimo y el local está decorado con mucho gusto, un poco de este rollo ecológico — moderno — vintage que se lleva ahora.
Totalmente recomendable, y uno de esos lugares que además de ofrecer un menú del día asequible y riquísimo es fantástico para celebrar cualquier reunión con amigos. ¡A mis favoritos directo!

Ayer fuimos a conocer este lugar. La comida, buenisima, el servicio también. Me parecio excelente para ir a comer con amigos. Pidan las rancheritas!

Un restaurante más que correcto, tanto para cenar con los amigos por la noche, como para el menú de mediodía. Carta ordenada por precios (ninguno superior a 14 euros), decoración rusti-​cool, y muy buena voluntad, tanto en la cocina como en el servicio. Solo única pega: su ecléctica banda sonora, que va desde el rumbeo hasta los éxitos pop de los ochenta, ¿es necesario?

Una amiga guatemalteca nos recomendó este restaurante hace unos días y hoy hemos ido a probarlo. Nos lo puso muy bien y la verdad es que tenía razón, nos ha gustado mucho la comida. Los dueños son de Guatemala y ya tenían un resturante en Logroño (yo recuerdo haberlo visto en un programa de televisión). Hace tres meses han abierto en pleno barrio de Chueca y parece que les va bien. Hoy sábado a mediodía estaba lleno y por lo visto por las noches es difícil encontrar sitio. La carta es variada y original, pues incluye una fusión de platos asiáticos, europeos, latinoamericanos y tex-​mex. Lo más original es la disposición de esos platos en la carta, por precios: a un euro, a 5 euros, a 9 euros y a 13 euros. Todo lo que hemos probado estaba delicioso y encima nos han invitado a los postres: nos han puesto tres para probar y estaban buenísimos. Por poner una pega, el ruido excesivo. Aun así, seguro que volvemos, y más de una vez. Me apetece probar el resto de los platos…

Went there for a group dinner Dec 8 and was treated to the most classic of spanish dinner. This was two thumbs up (high). Not a member of the party was disappointed and instead remarked at their professionalism and willingness to help those of us who were not Spanish. Fantastic food and as one person stated, «this is a gastonomic treat for our tastebuds.»
I would definitely go back (and back)
Ellis