Il Basilico

Localización y ambiente
Situado en una de las zonas más nuevas de Mairena, es un local que no destaca por exterior, donde sitúan algunas mesas que están cercanas a una carretera de frecuente paso. Es mucho más recomendable comer en su interior, decorado de manera sencilla en tonos blancos, negros y verdes. Asimismo, os recomiendo que reservéis con antelación, dado que no dispone de un número muy elevado de mesas y la ocupación suele ser alta. Puntuación 4.0.
Cocina
Me han encantado los diversos platos que he probado de este sitio, si bien sólo son unos cuantos de su extensa carta. Como buen italiano, la misma se estructura en Antipastis, Carpaccios, Risottos, Pastas frescas y Pizzas, así como algunos platos de Carne y Pescado. He probado los siguientes, los cuales indudablemente os recomiendo:
— Ensalada Siciliana, con canónigos, naranja, frutos secos y helado de Azahar. Es una auténtica maravilla. Si nunca has probado el helado de azahar, que prepara el afamado Joaquín Liria y podéis probar en su heladería «La Fiorentina», sin duda este plato va a sorprenderte. La combinación es excelente, haciendo el helado de «aliño» de la ensalada.
— Tagliolini con langostinos y cherry al marsala. Una pasta parecida al tagliatelle pero más estrecha con un potente sabor a marisco, y cocinada con tomates cherrys, langostinos y un vino dulce ligero como el marsala. Excelente presentación y sabor.
— Pizza Bresaola, con rúcula, lascas de parmesano y bresaola (carne de ternera curada durante unos 20 meses), la cual ponen en un último momento. No la había probado antes y me encantó, riquísima.
— Tiramisú. Espectacular. No soy un fan de este postre, en casi todos los sitios donde lo he probado me ha parecido demasiado «pesado». Aquí no, está perfectamente equilibrado en texturas y sabor. Una maravilla.
Disponen de muchos otros platos, y de una amplia variedad de pizzas. Sin duda, volveré a seguir probando más platos de la carta, aunque solo por la ensalada siciliana y el tiramisú merece la pena volver a este sitio las que veces que haga falta, son un MUST del lugar.
Aunque tengo que probar más platos, por el momento su puntuación es máxima. Puntuación 5.0
Bebidas
Este punto no lo valoraré en esta ocasión. Solo probamos una botella de lambrusco rosado FIORELLO a compartir, el cual estaba bueno aunque no soy fan de este vino.
Servicio
El servicio es excelente. Por un lado los camareros están siempre atentos y se interesan por lo que te ha parecido cada plato, así como te ofrecen sugerencias sobre los mismos. Por otro, una vez realizas la comanda te traen una cesta de pan para que pruebes el excelente AOVE que tienen colocado en cada mesa, el cual es soberbio. Se trata de AOVE Basilippo, que desarrollan con cariño y esfuerzo en la Hacienda Merrha, en la provincia de Sevilla, y que ha sido galardonado como el segundo mejor AOVE del mundo en este año. Por último, pedimos para compartir y con cada nuevo plato que nos sirvieron, nos cambiaron los cubiertos y la vajilla. Por todo ello, no puede sino tener también la puntuación máxima. Puntuación 5.0
Precio
El precio me parece muy acorde a la calidad de la comida y del servicio del local. Puedes comer perfectamente por unos 15 – 20 euros por persona. Puntuación 4.0
Sin lugar a dudas volveré más pronto que tarde para probar otros platos de su carta, dado que tiene grandes posibilidades para convertirse en mi italiano de referencia en Sevilla. Por el momento, su puntuación no puede ser menos que la máxima.

De los mejores restaurantes italianos, situado en Mairena del Aljarafe. He ido en un par de ocasiones y esta genial. Las ensaladas son muy recomendables, la ultima que pedimos fue la de canónigos con helado de azahar y naranjas y es una pasada, esta riquísima, y la pasta fresca y muy bien elaborada. La atencion del servicio genial, y decoracion muy cuidada. si vais por Mairena no dudeis en visitarlo.

Me encanta este restaurante, no es barato pero de vez en cuando uno se puede pegar un capricho. Lo que más me gustan las ensaladas, gran variedad y originalidad, las pastas frescas buenisimas. Carta de vinos bastante buena, hoy hemos probado uno con aroma de fresa que estaba riquísimo. El único pero para mi que no esta en Sevilla capital y un postre que tenían hace unos años de chocolate que estaba de muerte y que ya no esta en la carta

Trato estupendo de todo el equipo y local acogedor. Si vas a ir en horas complicadas mejor reservar antes.
No te olvides de probar el aceite y la melanzane.

Il Basilico es una experiencia para todos los sentidos. El mejor guiño que recibes al llegar es el de ese aceite Virgen Extra que lidera el sabor en la mesa, antes de que llegue cualquier plato. Al verlo y probarlo sabrás que ha sido una buena elección sentarte en este local.
Aunque está en las afueras de Sevilla, es una suerte para los que vivimos o frecuentamos el Aljarafe. Además, tiene el metro muy cerquita de la zona (10 minuto andando).
Los precios son acordes a los de un restaurante italiano, pero con una calidad y sabor en los platos que supera las expectativas que podrías tener. No he llegado a probar la pizza, pero la pasta, ensaladas y otros entrantes, están de vicio. Puede que no sea un lugar para ir todas las semanas, dependiendo de lo que te permita el bolsillo, pero es un buen lugar para celebrar ocasiones especiales o para darle un gusto al estómago y al paladar.
Por otro lado, hablemos de la cantidad, que es abundante. Aunque puedes pedir un plato individual y un entrante, es aconsejable probar varias cosas y compartirlas, aunque no sea lo habitual en un restaurante así.
Un punto a favor de Il Basilico es que la atención es exquisita y te servirán con una sonrisa.
No dejes de probarlo un día entre semana pues están bastante tranquilos y lo disfrutarás el doble.

Las veces que he venido he salido encantado. Sabemos que no es un lugar barato, pero tampoco tiene precios para tirarse de los pelos: creo que están ajustados a la calidad y al servicio que recibimos.
Siendo un restaurante italiano se aleja bastante, afortunadamente, de los tópicos de este tipo de locales pensados para turistas. Es decir, la decoración es elegante, moderna y pensada para el público local y no nos encontramos sillas de madera y mesa con mantel de cuadros blancos y rojos. El trato de los trabajadores es impecable y el detalle de poner uno de los mejores aceites que existen en la mesa para mojar con pan es ya merecedor de todo respeto.
Aquí he probado de todo, desde carpaccios hasta pizzas, pasando por pasta fresca, lomo alto, ensaladas o postres. Todo estaba siempre buenísimo y dan ganas de seguir viniendo para disfrutar del resto de la carta.

Hacía mucho tiempo que no venía y eso que vivo cerca.
La primera vez que vine hace ya unos años me dio la sensación de ser un sitio bastante estirado, dónde los platos eran escasos en relación al precio, pero la verdad es que ahora he vuelto y la sensación ha sido positiva. La atención perfecta, y la comida bastante buena, tanto la pasta como las pizzas.
También creo que puedes pedir pizzas para llevar.

Solo he ido una vez y ya iré en otra ocasión para constatar que no fue cuestión de suerte ;P. Pero la realidad es que me gustó mucho no solo por la comida, que también, si no sobre todo, y para mi lo mejor fue el trato que recibimos. El camarero nos atendió muy bien: estuvo en todo momento pendiente de nosotras pero sin agobiar, muy simpático y ayudándonos a elegir plato.
Tengo que decir, que este italiano llama la atención nada más entrar por su estética moderna o por lo menos a mi me la llamó porque no me lo esperaba así. Y porque además de ser un restaurante, también son una pequeñita «tienda» gourmet, vendiendo productos italianos como vinos, pasta y creo recordar que también quesos.
Al sentarnos, comenzaron con un detalle de la casa: pan y un buen aceite de oliva para comenzar la velada (que por cierto era sevillano y con un packaging muy bonito). Después la carta y la indecisión… ¡Todo sonaba muy bien! Los entrantes, los risottos, la gran variedad de pasta, pizzas y carnes, pero fiel a mi misma, ¡me decanté por un plato de pasta! Y aún así me resultó difícil elegir debido a la variedad y a lo bien que sonaban todos. Había uno con bogavante que tengo que probar cuando repita en Il Basilico.
Al final pedí unos «caramelos» de pasta rellenos de espinacas en salsa de gorgonzola y nueces. Si tengo que decir, por poner alguna pega, que estaban muy ricos, pero yo hubiera espesado un poco más la salsa y un poco más de sabor a queso.
Por otro lado, mi acompañante pidió una pizza que estaba muy buena, y a la que dejaron cambiar algunos ingredientes sin problema alguno (ya que son caseras y las hacen sobre la marcha).
Además, pedimos para el centro un carpaccio de salmón que creo que fue lo que más me gustó y enamoró de todo, ¡espectacular! Muy muy bueno y muy recomendable para quien vaya.
Como punto «negativo». Es de los sitios en los que te cobran el cubierto, algo que a mi por lo general me da mucho coraje (prefiero que el plato sea un pelín más caro pero no ver ese asunto en la cuenta.
Ya al postre no llegamos no porque no quisiéramos, porque no éramos capaces de tomar nada más (Y no morir en el intento).
A todo esto: buen trato y rica comida, se le sumó que este restaurante está dentro de Restaurant50 y que por tanto los platos principales tuvieron un 50% de descuento, por lo que finalmente la comida estuvo muy bien de precio.

Il Basilico es un restaurante de comida italiana completamente diferente a todos los otros que haya ido. Lejos de presentar un ambiente clásico o una decoración basada en elementos italianos el local es sobrio, vanguardista y moderno. Pese a no ser muy grande, los ventanales arrojan mucha luz al interior, generando una atmósfera muy agradable, con muchas mesas pero no masificada.
El servicio es muy amable y atento. Tras tomar nota de bebidas y entrantes, para amenizar la espera ofrecen a los comensales una «cata» con pan de aceite «Basilippo», de sabor verde y afrutado, que a mi personalmente me gusta bastante.
La carta se compone exclusivamente de platos italianos, unos más vanguardistas y otros tan típicos y tradicionales como la lasaña. En ella podemos encontrar un buen número de entrantes, carpaccios, risottos, pasta fresca y rellena, una amplia gama de pizzas, carnes… y así hasta completar la gran oferta de platos. La tónica predominante en los platos es la calidad, el sabor y una cuidada presentación, Ninguna receta de la carta te dejará indiferente. De entre toda la oferta recomiendo especialmente la pizza Il Basilico (rúcula, pesto y jamón de parma), el risotto de pato y el tortellacci tartufati (pasta rellena de ricotta con salsa de romero y trufa), los tres platos son una maravilla.
Además los precios son más que bajos para la calidad servida, el precio medio del plato ronda los 10 €, y si además perteneces al club Restaurant 50, los jueves los platos principales te costarán la mitad. Tal es así, que una comida de tres platos principales, pizza para compartir, tres bebidas y un postre, costó 36 € aprox.
En conclusión, Il Basilico ofrece una faceta de la gastronomía italiana hasta ahora desconocida para mí: platos de alta calidad y de cocina vanguardista, servicio y ambiente excelente y precios acordes al producto. Tienen que ir, y entonces tendrán que volver.

#LunesDeReseña
Una noche de primavera fuimos a conocer Il Basilico. Coincidió con la Feria de Sevilla, lo que hizo que el local estuviera bastante vacío y pudiéramos cenar prácticamente solos.
Nada más pedir los platos, nos ofrecieron un entrante para esperar a que salieran: un cestito de pan con aceite de oliva Virgen Extra Basilippo, la marca que distribuye especialmente a este restaurante. Una maravilla de entrante, ya solo con eso el local gana las 5 estrellas. Pero hay mucho más: probamos la ensalada siciliana, con naranja y helado de azahar. Tras probarla, me pregunté seriamente por qué el resto de ensaladas que he comido en mi vida no llevaban helado. Seguimos con una pizza Vecchia Signora, fina y riquísima, con una masa tan buena que, aunque suelo dejar a menudo los bordes de las pizzas para no llenarme y poder disfrutar de la parte central, no pude evitar comerme también los bordes de esta; y un plato de pasta fresca: Spaghetti chitarra con verduras en cesto de parmesano. El cesto de parmesano crujiente es probablemente lo mejor del plato, pero el resto no se queda atrás: la salsa de verduras está buenísima, y los spaghetti perfectamente cocidos al dente.
Como soy incapaz de ir a un restaurante que ofrezca tiramisú y no probarlo, pedimos este postre, que no solo cumple todos los requisitos que pido a un tiramisú (especialmente, que no sea demasiado dulce), sino que trae una sorpresa: cada capa de bizcocho lleva como base una lámina de chocolate crujiente. Muy muy bueno.
El camarero nos cuidó y mimó, y nos ayudó en todo momento a decidir lo que íbamos a tomar. Los precios me parecieron bastante razonables pero además, al ir con la tarjeta Restaurant 50, pudimos disfrutar de un descuento del 50% en los platos principales, por lo que al final la cena salió aún más económica.
Si tengo que pensar alguna queja del restaurante sería que no me pareció que tuviera terraza: aunque ya estamos en época de calor, no tenían ninguna puesta, aunque al salir sí vimos unas sillas apiladas junto a la puerta, por lo que quizá sí la tengan y esté aún en proceso de montaje. Tampoco me pareció que tuvieran Aperol (sí Campari), mi aperitivo preferido, que en España está aún poco a poco integrándose.

El arte de hacer bien las cosas a un precio razonable.
Llevaba tiempo oyendo hablar de este restaurante, tanto en prensa como por amigos, así que finalmente fuimos este viernes. Reservamos y a las diez ya estábamos en la mesa.
Lo primero que llama la atención son las formas sencillas y colores del establecimiento, color verde muy agradable con negro y estampados en alguna pared. La cocina abierta y acristalada. Ambiente agradable.
El servicio de impecable negro y muy correctos en el trato.
Aceite AOVE Basilippo y pan para comenzar.
Centrándonos en la comida, una amplia y surtida carta, muy bien escogida.
Para la cena nos decantamos por comenzar por ensalada de canónigos, naranja confitada y helado (sí, habéis leído bien) al aceite de naranja y un surtido de quesos italianos, ambos muy buenos.
Para beber, vino, un Chianti.
Como plato principal, opté por el risotto de pato, que en proporción, sabor y precio, muy recomendable. Mis amigos optaron por pasta fresca, espaguetis sobre tulipa de parmesano y tortelinis de gran tamaño con salsa de trufa. Probé de todos y la verdad, me encantaron.
De postre, canolos de ricotta y chocolate, tiramisú y aprovechando que el jueves hubo cata de aceites, postre fuera de carta: brownie con helado de aceite de vainilla y fondo de aceite Basilippo, ¡espectaculares!
No puedo decir lo mismo del capuccino, que aunque sea café Lavazza, no levantaron bien la espuma de leche… Por ponerle un PERO ;-)
En cuanto a esta almazara, Basilippo, amén de ser proveedores del local, es uno de los mejores y más apreciados aceites españoles, producidos en el Viso del Alcor, en la vega de Carmona. Botellas numeradas con fecha de añada que dan fe de la calidad del aceite y que sea AOVE puro. ¡Otro nivel!
En definitiva, buena materia prima, ambientación del local y óptimo servicio, hacen de él una gran elección para comer por el Aljarafe.
Y como me quedaron ganas de probar muchos platos, racionando me da para ir varias ocasiones más, que de seguir así en calidad y satisfacción, no serán las últimas.
Como dato gracioso, más que llamarlo il Basilico (albahaca) podían haberle puesto il rosmarino, romero, especie con la que ultiman la presentación de sus platos.

Un lugar estupendo para comer comida italiana auténtica. Ademas con la tarjeta Restaurant50 nos hicieron un descuento del 50% en los platos, genial.

La milhojas de berenjena espectacular! Hemos probado el carpaccio de ternera con parmesano y rúcula, delicioso. Muy recomendable también el vino Ciró blanco, con algo de aguja, lo que lo hace estupendo para acompañar estos platos. Repetiremos, sin duda, ambiente muy agradable para las familias o para una romántica cena en pareja.

Best Italian food in Seville.
Fantastic fresh pasta, superb pizzas, and delicious salads.

Situado en la «zona nueva» de Mairena del Aljarafe, se trata de todo un descubrimiento. Cocina italiana de verdad (no como el producto macarrónico que ofrecen muchos establecimientos), con italianos de verdad (remito a las reseñas de prensa que contiene su página web).
La pasta tiene un sabor inmejorable, pero el premio gordo se lo llevan las milhojas de berenjena. De precio, incluso económico para lo que ofrecen: unos 9 – 10 € la mayoría de los platos con cantidades, a mi juicio, adecuadas.
Por poner un pero: que está en Mairena del Aljarafe (mi hábitat natural es el centro de Sevilla)

Restaurante magnifico, los platos con una presentación exquisita, igual que su sabor, todos los productos italianos y la pasta fresca, pizzas sensacionales y el hilo musical muy curioso, lo recomiendo para todo el mundo

hemos venido por recomendacion… y en verdad que es recomendable :) todo muy bueno y pizzas de masa fina muy, muy buenas

Posiblemente el mejor restaurante italiano que se puede encontrar en Sevilla y alrededores. Tiene una decoración muy vanguardista, luminosa y algo fría, pero no os dejéis engañar por su aspecto. Se come realmente bien.
Hay que destacar especialmente sus ensaladas y sus pizzas, pero la pasta también es deliciosa. Los precios están aceptablemente bien para la calidad que ofrecen. Las pizzas rondan los 7 – 8 euros y los platos tienen una media de 10 – 12. No es para ir a diario, pero sí de vez en cuando.