En plena Sierra de Madrid, en el pueblo de Miraflores este restaurante de raciones, tapas y menú esconde un secreto en la elaboración de arroces y fideuas. No solo se come carne en la montaña. El interior es más bien«cutrecillo», pero nada que ver con que no tenga calidad, en absoluto! Es agradable además su chimenea que le proporciona un toque hogareño. Su terraza en plena plaza ofrece un espacio abierto en plena plaza del pueblo y con suficientes mesas. El menú son 14 €, que no incluye postre. Los camareros muy majos y auténticos! Así que a disfrutarlo!