La parranda

Hace mucho tiempo cuando la afluencia de bares no era tanta como lo es actualmente, era un lugar muy famoso, y claro que podías armar la fiesta en este lugar (claro hasta ahora si lo deseas), pero su concepto no se renovó mucho así que no es un lugar que escucharás con frecuencia en un plan armado.
La decoración que trae el lugar, te invitan a pasarla muy bien, así en un concepto 100% mexicano sintiéndote siempre como en casa.
Con respecto a la comida les recomiendo los nachos con queso y carne al pastor, los tacos también, son muy ricos y te aseguro que tu paladar te lo agradecerá, sobre todo si ya empezaste con los tragos y el alcohol.
Te recomiendo pedir la parte de la terraza ya que de noche se ve muy bonita la iluminación y todo Paseo Montejo. Un muy buen lugar si quieres desestresarte, salir de la rutina de los clásicos bares, pero definitivamente necesita actualizarse bastante.

Fui en plan «salida improvisada» y bien me pude quedar en mi casa, pedir unos nachos más grandes y baratos, y gozar de mi noche.
Al llegar había mucha gente en la parte de adentro y pocos en la terracita, así que optamos por afuera, después de una hora los grupos del interior comenzaron a bailar y cantar (mejor dicho washawashear) canciones en inglés, en efeco eran unos turístas disfrutando de sus margaritas, brincoteando al ritmo de música mexicana, rolandose los «sombreuros“jaja
Los mexicanos que estábamos ahí sólo veíamos e intentábamos divertirnos, pero no, el ambiente no es como para parrandear, así que el nombre no le queda mucho a menos que seas un extranjero dispuesto a sentirte en fiesta mexicana por precios de fiesta de la monarquía, ya que para lo que dan es caro.
El servicio es bueno, sólo se les olvidan un poco las mesas de afuera y presionan para que sigas consumiendo y de no hacerlo podrías recibir una cara de pocos amigos que no hace feliz a nadie y menos te hará sentir cómodo.

Un lugar que tiempo atrás era uno de los preferidos por muchas personas y en especial familias y grupos de amigos. Peeero, de un tiempo para acá comenzó a decaer y la calidad de los alimentos bajarón y eso ya no me gusto y mucho menos a las personas con las que lo frecuentaba.
La última vez que fui, seguian con el buen servicio que es de aplaudirse, y con sus shows comicos, musica en vivo y uno que otro día de karaōke se ponia bueno. Pero la gente se da cuenta cuando el sabor no es el mismo, ya no hay tantas promos como antes y eso ya mantiene a la clientela. Es un buen lugar y esperemos que no decaiga y se sepa reinventar.

La Parranda surge como una versión más informal y al mismo tiempo más pachanguera que La Parrilla.
Al igual que este ya tradicional restaurante, se especializa en carnes y tacos, de los cuales por cierto no puedo dejar de recomendarles las gringas de arrachera, pero también podrán encontrar muchas otras cosas que deleiten su paladar.
Lo que hace especial a La Parranda es que, como su nombre lo indica, es un buen lugar para irse de fiesta, a diferencia de La Parrilla, que es más bien un restaurante familiar.
La Parranda se queda abierta hasta tarde por la noche, y cuenta con música en vivo que se pone muy guapachosa en ocasiones, y hasta con un show cómico-​mágico-​musical, o si de plano no tienes inhibiciones, Karaōke abierto.
En definitiva es un lugar al que vas a reír y a pasarla bien con los amigos, mientras disfrutas de platillos deliciosos y unas buenas bebidas.

Lugar totalmente turístico en una calle realmente turística (ósea Paseo de Montejo). Visité este lugar uno de esos viernes donde el aburrimiento te invade y todo parece indicar te iras a dormir temprano, hasta que una llamada repentina y con plan armado consigue sacarte de tu cama.
La decoración y el ambiente súper padres, los meseros muy amables y el menú muy mexicano normal; sin embargo los precios están un poco elevados para la comida que manejan y la verdad ir en plan de estudiantes conviene muy poco.
Si ya estas ahí y muere de hambre unos nachos de pastor con buenas salsas siempre te sacan del apuro, pero no recomendaría llegar a este lugar por iniciativa propia, a menos que tengas algún familiar turista que quiera luego caminarse por Montejo.

Hasta hace poco uno de los mejores restaurantes de comida mexicana, incluso considerada cantina mexicana. No sé qué pasó, tal vez el concepto ya no se renovó. Tengo buenos recuerdos del lugar, era un buen lugar para cenar unos tacos o nachos al pastor, el show no estaba nada mal, hay incluso karaōke y música en vivo, sin embargo la calidad de la comida como que empezó a bajar e incluso el tamaño de las porciones deja mucho que desear.
Por el precio que manejan y el escaso ambiente que puedes encontrar, creo que hay muchas opciones mejores. Creo que urge una renovación, tanto en el concepto como en la calidad de la comida. Incluso hasta para los cazadores de promociones no nos vendría mal una que otra promo, aunque sea en bebidas, pero ni eso.

Este es un lugar que a mi me gusta mucho, la comida es rica, pero más que nada lo que me gusta es el ambiente.
Para empezar considero que la localización es muy buena, este lugar esta en esquina y en esta parta podemos encontrar la terraza, ahora dependiendo de que día vas, los meseros te avisaran si abra show o no, yo fui un jueves y antes de darnos la mesa, nos comentaron que abría un show cómico yucateco y fue así que decidimos sentarnos cerca del «escenario».
La verdad pase un momento muy agradable, el ambiente es más de echar un rato relajo, con amigos, familia o pareja, lo único malo es que ya no alcance mesa, nos tuvimos que sentar en la barra, pero la verdad es que valió la pena, porque el show esta muy padre, si te saca tus risitas.
La comida como mencione antes esta rica, los cocteles también, y los hombres no se preocupen, también venden cerveza.